Para dar mi opinión sobre las tecnologías en el aula y sus mejoras provocadas, hablaré de una experiencia de innovación, de la incorporación de pizarras electrónicas dentro de un colegio de primaria.
En las aulas los alumnos contaban con ordenadores portátiles para hacer trabajos y estudiar. El profesor notaba la importancia de tener un ordenador “gigante” en el aula, para trabajar con él al igual que sus alumnos, y enseñarles materiales didácticos en el momento; mostrar vídeos educativos; realizar ejercicios: enseñar imágenes de algún tema; leer artículos; consultar otras páginas de interés… etc. Fomentar la enseñanza y el interés, con la ayuda de juegos, canciones, vídeos… Con la pizarra electrónica no sólo trabajaba el profesor, los alumnos también se levantaban de los pupitres y adquirían más dinamismo en la clase.
Se ejecutaron medidas transitorias y se puso en marcha un plan de acción, el cual fue seguido en forma de evaluación procesual. Se contaba con el apoyo de “cañones” electrónicos para mostrar imágenes en la pared.
Finalmente se hizo una evaluación final de la compra con resultado satisfactorio. La conexión a internet permitía hacer los usos correspondientes y los alumnos veían todo lo que el profesor les quería mostrar en una pizarra que cubría gran parte de la pared frontal del aula.
Las clases se convirtieron en un lugar de enseñanza mucho más visual auditivo y participativo que antes, logrando captar una mayor atención de los niños y haciendo que se familiaricen más con los ordenadores y todos los usos que se les pueden dar.